03 Octubre 2022

LA CULTURA LEBARON NO LOS ASEMEJAN A LAS COMUNIDADES INDÍGENAS O NATIVAS DEL NOROESTE DE MÉXICO, DICTAMINA INAH SOBRE LA SOLICITUD AUTOGOBIERNO A ESTA COMUNIDAD

Ante la presencia de más de cincuenta personas representantes de la comunidad LeBarón, así como de personal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), el Tribunal Estatal Electoral (TEE), desarrolló la audiencia de desahogo del dictamen antropológico realizado por la dependencia federal y el cual les fue presentado a las partes el pasado 20 de septiembre.

 

Previo a dar inicio con la audiencia, la magistrada presidente del TEE, Roxana García, quiso aclarar que dicho estudio fue realizado por una institución ajena al órgano electoral, guiándose con plena independencia, imparcialidad y autonomía en este y todos los casos, motivo por el cual rechazó las declaraciones emitidas por representantes de la comunidad LeBarón ante los medios de comunicación en donde los acusaba de haberse sometido a las presiones de particulares para rechazar la autodeterminación.

 

García Moreno detalló parte del trabajo que han realizado en el TEE desde que el tema llegó a su jurisdicción, teniendo siempre un compromiso de sacar adelante de manera objetiva, motivo por el cual se dieron a la tarea no solo de analizar el estudio antropológico, así como el expediente, el cual consta de 2 mil 585 páginas, lo cual ha implicado el desarrollo de siete audiencias y 54 acuerdos de sustanciación, la lectura de cuatro libros presentados por la propia comunidad, la visita al lugar en el que se asientan.

 

Los principales temas que se abordaron en el estudio antropológico fueron la caracterización de la comunidad LeBarón, los antecedentes históricos de la colonia LeBarón, el sistema de gobierno, la diferencia cultural, la participación de la mujer en el sistema de gobierno, y los inicios de la autodeterminación.

 

Mientras tanto, las conclusiones a las que llegó el INAH y que abonarán a la resolución que dará aproximadamente en quince días el TEE, fueron que la comunidad es de origen y tradición anglosajona que profesa en su mayoría la religión mormona fundamentalista y que tienen un fuerte sentimiento de pertenencia.

 

Sobre la diferencia cultural, comentan que existen claras diferencias con la población mexicana y el municipio de Galeana, también que existe la fuerte intención de mantener esa diferencia cultural y de reproducirla a diario. Comentan que las principales diferencias que se observan son el matrimonio polígamo, la religión mormona, el idioma, la binacionalidad y la alta condición económica.

 

Empero, precisaron que eso no los asemejan a las comunidades indígenas o nativas del noroeste de México ni del resto del país. Es decir, sus valores económicos y religiosos, su relación con la naturaleza, su tendencia por la propiedad privada y el sentido de ganancia y rentabilidad, no son preceptos fundamentales que se encuentren en otras poblaciones originarias de México.

 

Respecto a la poligamia, se comentó que los principios de este tipo de familia, se sustenta “en una lógica claramente patriarcal” a través de la cual se reproducen y estructuran las distinciones de los roles entre hombres y mujeres. “Las mujeres en la colonia LeBarón están destinadas a la procreación y los varones a las actividades productivas”.

 

En relación a la tierra, la noción que tienen sobre esta es de propiedad y dominio, además de que no hay percepción de igualdad, de ser parte de un mismo ente, sino de posesión y colonización de hacer rentable lo indómito, de control sobre recursos y naturalezas. En la parte agraria, han ido adquiriendo más tierras tanto dentro el ejido y fuera de él.

 

De la condición de desventaja cultural y riesgo de asilamiento, el INAH no observó que haya un riesgo latente en la comunidad LeBarón de perder sus especificaciones culturales o de sumirse a la cultura mexicana de la región, la cual incluso algunos de los integrantes la rechazan. Tampoco observan que esta comunidad se encuentre amenazada respecto a su continuidad cultural.

 

“A diferencia de otras poblaciones marginadas y violentadas sistemáticamente por su condición de pobreza, de aislamiento o de vulnerabilidad, la comunidad LeBarón no tiene estas condiciones estructurales que el derecho mexicano trata de resarcir mediante el reconocimiento de derechos progresivos que apoyen o posibiliten mejoras en sus condiciones de vida”.

 

Ante tal exposición, el abogado defensor de la comunidad LeBarón, Esteban Barrio, lanzó una serie de interrogantes a los representantes del INAH a fin de esclarecer los motivos por los cuales llegaron a las conclusiones que dieron a conocer. Intentó también mostrar las resoluciones a las cuales llegó su antropóloga privada, Olivia Domínguez; empero, eso le fue negado, pues recordaron que el 3 de abril del presente año se hizo un ejercicio igual al efectuado este lunes en donde la comunidad LeBarón pudo dar muestra de ese estudio.